A Benedicto XIII le tocó el Cisma de Occidente, o
sea, el exilio de los Papas a Avignon por influencia de la monarquía francesa.
Nació en Illueca (Zaragoza) en 1328 y murió en Peñíscola
(Castellón) en 1423. ¡Vivió 96 años!
Fue elegido Papa en Avignon y como Roma también
contaba con un Papa, se estableció el Concilio de Constanza eligiendo un Papa
único para toda la cristiandad; pero el Papa Luna siguió considerándose el Papa
legítimo y fue calificado como el “Antipapa”.
Se refugió en Peñíscola gracias al rey Alfonso V de
Aragón y allí vivió hasta su muerte.
El Castillo de Peñíscola fue su hogar durante años.
Cuando iban a apresarlo bajaba unas escaleras en forma de pasadizo para
escapar. Allí tenía un barco que no era visible para sus enemigos.
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